Su fundadora, Susana S. Côte, fascinada por la magia de las sirenas, creció sin cumplir su sueño, pero no se conformó con ello y decidió fabricarse su propia cola de sirena.
Con estudios de moda oficiales, ganas de emprender y una afición desconocida, Susana consigue cumplir su sueño y comienza un movimiento que está dando la vuelta al mundo, el movimiento Sairens.